Acostumbrados a estar en reunión, escuchar música y demás
con auriculares, no somos conscientes de lo que implica para nuestro oído.
Más de mil millones de adolescentes y jóvenes corren el riesgo
potencial de perder la audición debido al uso de audífonos earpods y a la
asistencia a lugares con música alta, concluye un análisis de datos
publicado en la revista de acceso abierto BMJ Global Health. La Organización
Mundial de la Salud (OMS) estima que más de 430 millones de personas en todo el
mundo tienen actualmente una pérdida auditiva discapacitante. Los
jóvenes son particularmente vulnerables debido al uso de dispositivos de
escucha personal como: teléfonos inteligentes, auriculares y audífonos, y a la
asistencia a lugares con música a todo volumen.
Ignorancia masiva sobre el oído
Investigaciones publicadas anteriormente sugieren que los
usuarios de estos aparatos a menudo eligen volúmenes tan altos como 105 dB,
mientras que los niveles de sonido promedio en los lugares de entretenimiento
oscilan entre 104 y 112 dB, lo que supera los niveles permitidos (80 dB
para adultos; 75 dB para niños), incluso durante períodos muy cortos de tiempo.
Los investigadores querían medir la prevalencia de prácticas auditivas
inseguras entre adolescentes y adultos jóvenes para crear una estimación a
personas de 12 a 34 años e informaron sobre los niveles de salida del
dispositivo medidos objetivamente y la duración de la exposición. Se incluyó un
grupo de 33 estudios, correspondientes a datos de 35 registros y 19.046
participantes; 17 registros se centraron en el uso de dispositivos y 18 se
centraron en lugares de entretenimiento ruidosos. Los investigadores también
estimaron el número global de personas que podrían estar en riesgo de pérdida auditiva al considerar la población global estimada de 12 a 34 años en 2022
(2.800 millones) y las mejores estimaciones de exposición a prácticas auditivas inseguras con dispositivos o lugares de entretenimiento. El
análisis de datos agrupados indica que la prevalencia de prácticas de escucha inseguras por el uso de dispositivos y la asistencia a lugares de
entretenimiento ruidosos, es común: 24 % y 48 %, respectivamente,
entre adolescentes y jóvenes de todo el mundo. Sobre la base en estas cifras,
los investigadores estiman que la cantidad global de adolescentes y adultos
jóvenes que podrían estar potencialmente en riesgo de pérdida auditiva como
resultado oscila entre 670 y 1.350 millones. Sus hallazgos los llevan a
concluir: “Existe una necesidad urgente de que los gobiernos, la industria y la
sociedad civil den prioridad a la prevención global de la pérdida auditiva
mediante la promoción de prácticas de escucha segura”