Vista cansada Vista cansada

La vista, uno de los sentidos que más nos ayuda a vivir, muchas veces no recibe el cuidado necesario.

Al sostener una mancuerna con el brazo extendido, los músculos se cansan rápidamente. Lo mismo sucede con los ojos cuando se les exige demasiado. Si los músculos oculares que permiten enfocar la vista no tienen oportunidad de relajarse, pronto el agotamiento comienza a hacerse sentir. Hasta es posible experimentar dificultades para hacer foco y sentir dolor rápidamente al tratar de ver bajo la luz brillante del sol. Descanse la vista, pestañee y cierre los ojos Al trabajar en cualquier tarea que demande profunda concentración, tome un descanso cada 20 minutos aproximadamente.

Observe algún objeto que se encuentre lejos (por ejemplo, un cuadro en la pared opuesta, o mirar por la ventana), durante al menos 30 segundos. Al cambiar el foco, los ojos descansan. Pestañee con frecuencia al mirar la televisión o la pantalla de la computadora durante largos períodos. Al pestañear se humedecen los globos oculares, y los músculos del ojo se relajan. Al realizar tareas extensas que requieran mantener la mirada fi - ja durante lapsos prolongados, cierre los ojos periódicamente. Ajuste el monitor Mantenga alto el contraste del monitor de la computadora. De esta manera, letras e imágenes adquieren mayor nitidez. 

Consejos para proteger la vista


Ajuste la altura de la silla de modo tal que usted mire la pantalla ligeramente desde arriba. Incline la pantalla hasta encontrar el punto ideal respecto de la altura de los ojos.

• Asegúrese de que la distancia entre la pantalla de la computadora y los ojos sea de al menos 50 cm.

Ajuste la pantalla o cierre las cortinas o persianas cercanas al área de trabajo a fin de reducir al mínimo el brillo sobre la pantalla.

• Para aquellos que tienen problemas de vista, posiblemente resulte más cómodo intentar leer o mirar la pantalla de la computadora sin usar los lentes para ver de lejos.

Opte por un tamaño de fuente más grande, de modo que no sea necesario tanto esfuerzo para hacer foco, o agrande la vista de la pantalla aproximadamente al 150 % para poder leer con claridad. Protéjase los ojos Use siempre anteojos al estar expuesto al sol brillante, incluso durante el invierno. Los anteojos ayudan a reducir las molestias que se producen por no cuidar adecuadamente los ojos. Los mejores anteojos poseen lentes de color amarillo, ámbar, naranja o marrón. Alivio con frío o calor

• Para relajar los músculos de los ojos, frote enérgicamente las manos hasta que adquieran temperatura y luego coloque suavemente la parte inferior de las palmas sobre los ojos cerrados. Haga esto durante unos segundos.

Empape una toalla pequeña con agua fría, escurra y colóquela sobre los ojos durante cinco minutos para aliviar la sensación de cansancio. Iluminar la vida Generalmente, una lámpara de lectura con bajo voltaje resulta más efectiva que una lámpara de escritorio de voltaje más alto. La lámpara de lectura no debe ser nunca la única fuente de iluminación de un ambiente. Es mejor que haya otras luces encendidas. Cuando existe mucho contraste entre la luz de lectura y el resto del ambiente, las pupilas tienen que contraerse y expandirse constantemente para adecuarse a la diferencia. Evite leer bajo luces fluorescentes. Estas luces muchas veces titilan y agravan la fatiga. La luz incandescente, la común, es la mejor opción; puede probar aquellas que imitan la luz natural del día, especialmente para trabajos que requieren mirar a corta distancia. 

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