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Con unas sencillas técnicas de respiración, puede mejorar su bienestar y tranquilidad.

Respirar es la función más importante de la vida de un ser vivo, pero muchos de nosotros no siempre tomamos conciencia de ello, ya que se trata de un proceso mecánico inconsciente. Ahora bien, vale el esfuerzo revisar la función respiratoria y aprender a prestar mayor atención a ella. A continuación, sus aspectos centrales.

Cómo es la mecánica respiratoria

Comencemos por la inspiración, que impulsa el oxígeno a través de la nariz hacia la faringe, laringe, tráquea, bronquios, bronquiolos y alveolos pulmonares. Todo esto conforma el aparato respiratorio que tiene por función llevar el oxígeno que necesitamos para utilizarlo en procesos bioquímicos y metabólicos, para –luego– expulsar dióxido de carbono como intercambio mediante la espiración. En busca de mantener el intercambio entre oxígeno y dióxido de carbono, entran y salen de los pulmones entre cinco y ocho litros de aire por cada minuto. De estos se transfiere, aproximadamente, un 30% de oxígeno por minuto, y el mismo porcentaje de dióxido de carbono es exhalado.

Cómo respirar mejor

Pese a que la respiración conforma un proceso mecánico, y cuyas alteraciones varían de acuerdo a la presencia de problemas de salud agudos o crónicos, es importante saber que existen ciertos tipos derespiración que son más beneficiosas para nuestro organismo, y para ello existen algunos ejercicios que nos pueden ayudar. En las personas jóvenes con capacidad pulmonar normal respirar se hace muy sencillo, pero con los años la capacidad elástica del pulmón se ve disminuida, por lo que la probabilidad de infección pulmonar ya sea por virus o bacterias aumenta. Esto debido a que la persona inspira aire pero no se expulsa la totalidad del mismo en la espiración, quedando un residuo, lo que no permite al diafragma -el músculo principal de la respiración- hacer bien su trabajo, teniendo nuestro cuerpo la necesidad de utilizar otros músculos del tórax, lo cual resulta perjudicial a largo plazo. 

Dos ejercicios que se pueden usar para una mejor respiración:

1) Tome aire por la nariz normalmente, sin forzar, contar hasta tres y botar por la boca como si estuviera soplando largo, contando hasta cinco. Se recomienda hacerlo concientemente y basta tan solo un minuto, de dos a tres veces al día.

2) Tape su fosa nasal derecha con un dedo, inspire por la fosa nasal izquierda contando hasta tres y luego bote el aire por ambas fosas nasales contando hasta tres; luego tape su fosa nasal izquierda y respire por la fosa nasal derecha contando hasta tres y bote el aire por la nariz contando hasta tres, por un minuto. Este ejercicio se puede hacer una vez al día o cuando usted se encuentre un poco ansioso.

Atención plena para calmar la ansiedad

Cada vez más frecuentes diversos problemas de ansiedad en muchas personas, derivados del permanecer en casa por tiempos prolongados, el confinamiento y los diversos sucesos externos que generan temor, desesperanza y otras emociones displacenteras. Existen variadas formas de relajarnos para calmar la ansiedad, siendo una de las más populares en los últimos años el mindfulness, que consiste básicamente en prestar atención plena a cada acción que realicemos. En el caso de la respiración, podemos tomar un momento del día en el que podamos estar tranquilos y en silencio, cerramos los ojos y simplemente, nos enfocamos 100% en nuestra respiración. No nos identificamos con los pensamientos, que siempre vienen y van, y fijamos nuestro enfoque únicamente en el acto de respirar, desde que tomamos aire conscientemente por nuestra nariz hasta que lo exhalamos gentilmente. Veremos que con ello iremos más profundo y nos anclaremos en el aquí y ahora, tan importante para nuestro bienestar y tranquilidad. Como ven, en el proceso respiratorio participan tantos factores que no siempre se consideran en el diario vivir, y ya que como seres humanos tendemos a valorar lo que tenemos una vez que lo vemos disminuido o tenemos riesgo de perderlo, es de suma importancia comenzar a prestar atención a acciones tan básicas, pero trascendentales como es el cuidar el sagrado acto de respirar. 

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