Si suele correr, estas técnicas lo ayudarán a hacerlo de
manera segura.
1. MANTENER LOS PIES APUNTANDO HACIA DELANTE
Es muy importante que los pies apunten a la dirección
hacia la que usted está corriendo. Si los pies giran, la rodilla los
seguirá, y si esto ocurre, es probable que se genere dolor en la rodilla, dado
que esta se torcerá en cada pisada y se alterará su dinámica de movimiento
habitual. En cambio, trate de que los pies mantengan trayectorias paralelas
y que apunten hacia delante. Puede que al hacer esto note un aumento en la
activación de los aductores, pero desde luego es algo que puede ayudarlo a
correr mejor y a reducir los movimientos que no lo hacen avanzar hacia delante.
2. NO LEVANTAR LAS RODILLAS AL CORRER
Precisamente, es conveniente que no flexione demasiado las rodillas al correr tratando de levantarlas para dar una zancada más larga.
No tiene que forzar un movimiento determinado a la hora de correr; tiene que
correr de manera natural y sin complicarse demasiado. Si su zancada es más
corta, puede aprovechar para hacerla más frecuente.
3. IMPACTAR CON LA ZONA MEDIA DEL PIE
Desgraciadamente, es bastante habitual ver mucha gente que
amortigua sus pisadas con el talón del pie cuando corre. Esto genera un impacto
importante en toda la pierna, ya que el talón no tiene tanta capacidad de
amortiguar como otras partes del pie. La zona media y la puntera, al ser
zonas más móviles, pueden actuar mejor como suspensión y por lo tanto pueden
ser más indicadas para amortiguar la pisada, aunque la desventaja que tiene
la puntera es que es una zona más débil y por ello deberíamos decantarnos por
la zona media.